¿Sabes qué son las soft skills? Las “habilidades suaves” están de moda, aunque llevan siglos con nosotros. Son esas capacidades (normalmente adquiridas a lo largo del tiempo) que no se estudian ni se aprenden, pero contribuyen a que el trabajo en equipo sea fluido y eficaz. La comunicación no verbal es una de las más importantes: aquellas personas que son capaces de transmitir ideas y sentimientos a través de la imagen tienen muchas más opciones laborales, y son mejor valoradas en su trabajo. Saber dibujar es, en este sentido, una herramienta muy poderosa que puede colocarte por delante de otros candidatos a un puesto de trabajo. ¡Incluso aunque no sea del ámbito del arte!
El dibujo y la comunicación no verbal: todos somos artistas
Todas las personas dibujan en sus primeros años de infancia. Líneas, círculos, manchas… Son años de libertad creativa, sin límites ni objetivos. Muchos expertos opinan que, a partir de cierta edad, esta libertad se coarta empujando al niño o a la niña a imitar en sus dibujos la realidad que le rodea. Entonces, si lo que dibuja no se parece o tiene errores de perspectiva, coloreado, etc., el niño o la niña termina por frustrarse y abandona el empeño. Es una pena, porque el dibujo es una herramienta esencial para desarrollar la personalidad, la creatividad y la relación con nuestro entorno: es un arma muy poderosa, por ejemplo, para estimular la comunicación no verbal y utilizarla en nuestro beneficio.
El artista y experto en arteterapia Javier Melguizo, fundador del proyecto Hephaisto, lo expresa en palabras muy claras: “al dejar de dibujar perdemos la capacidad de usar nuestro mundo creativo como una forma de expresión emocional y de autoconocimiento”. Y aunque muchas veces nos hayan dicho todo lo contrario, todo el mundo tiene la capacidad de aprender a dibujar y utilizar este potencial en su vida familiar y laboral. Porque el dibujo tiene múltiples aplicaciones fuera del mundo del arte, algo que los profesionales tienen muy claro. Por ejemplo, la psicóloga Amaya Terrón explicaba en una entrevista que ayuda a la concentración, estimula el cerebro, entrena la memoria e impulsa la capacidad de introspección. ¿Qué más se puede pedir?
Una herramienta súper práctica para cualquier profesión
Está claro que dentro del sector artístico existen múltiples vías y salidas profesionales (no te pierdas este artículo sobre cómo trabajar dibujando y hacer de tu habilidad una profesión). Pero también hay otros trabajos en los que el dibujo puede ser de gran ayuda. Por ejemplo, dentro del ámbito de la ingeniería es una disciplina a la que se le da muchísima importancia… En este post te contamos cómo se aplica y por qué es interesante que los ingenieros entrenen la destreza. Por otra parte, en un sector laboral totalmente distinto como puede ser la sanidad, también hay expertos que apuestan por el dibujo como medio de comunicación.
Es el caso del enfermero y experto en desarrollo rural Daniel Gonzalo Eslava Albarracín, que en su Colombia natal lo utiliza para conectar con campesinos y campesinas a quienes les resulta complicado expresarse, o comprender el lenguaje técnico. “El dibujo es para nosotros una excelente herramienta para la comunicación, un espacio de iguales, un lugar donde la creatividad y la imaginación surgen como verdaderas estrategias para el cambio y la mejora de realidades diversas y semejantes en la población”, señala en una entrevista para la revista online Faros, del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona.
Cursos de dibujo: la clave para sacar todo el partido a tus conocimientos
Está claro que el potencial para dibujar lo tenemos todos. Y también, que si aprendemos la técnica y la desarrollamos le sacaremos mucho más partido que si intentamos aprender de forma autodidacta. Por tanto, es el momento de valorar: ¿me apunto a un curso de dibujo o aprendo por mi cuenta? Sin duda, nosotros apostamos por la formación con docentes profesionales. No solo porque es la única manera de avanzar de forma rápida y asentar los conocimientos, sino porque muchas de las técnicas (tradicionales o tecnológicas) no están normalmente a nuestro alcance, o ni siquiera sabemos que existen. En este sentido, los cursos de dibujo son una fantástica opción: la progresión y los resultados son mucho más inmediatos que si dedicamos al dibujo tan solo un ratito en casa, de vez en cuando.
El Curso de Ilustración y Dibujo de ESDIP, un completísimo programa de 3 años de duración, te ayudará a alcanzar tus metas. Aprenderás a dominar la perspectiva, el dibujo a mano alzada, la escala, el color, el relieve, el sombreado… Y a trasladar tus obras y editarlas mediante programas de uso profesional. Y por supuesto, a utilizarlo para desarrollar tus habilidades para la comunicación no verbal. Cuando veas lo que puedes conseguir, te sorprenderás de los resultados. ¿Estás listo para empezar?